Señor, no entiendo pero creo.
"No entiendo pero creo" Resulta más fácil decirlo que aplicarlo, ¿no? Considerando que como seres humanos siempre estamos buscándole una explicación a absolutamente todo.
De seguro has escuchado la frase "ver para creer". Y es que si lo vemos desde el punto de vista de la lógica, no podemos creer 100% en algo que no hemos visto por nuestra propia cuenta. Pero déjame decirte que la fe no funciona así. La fe significa creer sin haber visto, escuchado o sentido. ¡Sí! Un poco loco ¿verdad? "Tener fe es tener la plena seguridad de recibir lo que se espera; es estar convencidos de la realidad de cosas que no vemos" Hebreos 11:1. Pero y... ¿Cómo te convences de algo que ni siquiera estás viendo?
Acércate a Dios: no puedes confiar en una persona si no la conoces bien ¿verdad? Y para conocerla tienes que pasar tiempo con ella y entre más tiempo pasen juntos, más la llegarás a conocer y puede que hasta se forme una linda amistad. Pues exactamente lo mismo pasa con Dios. Si no lo conoces ¿como esperas llegar confiar ciegamente en Él? Si no le dedicas tiempo, no podrás conocerle. Dios siempre está dispuesto a escucharte, está solamente a una oración de por medio. "Acérquense a Dios, y él se acercará a ustedes." Santiago 4:8
Lee/ escucha la Palabra de Dios: cuanto más sepas sobre la palabra de Dios, te resultará más fácil aumentar tu fe. Porque: "la fe viene como resultado de oír el mensaje, y el mensaje que se oye es la palabra de Cristo." Romanos 10:17 Hoy en día hay tantas formas de que el mensaje y la Palabra de Dios llegue a nuestros oídos/ojos, solo es cuestión que tú estés dispuesto a escuchar. No tienes que pasar todo el día leyendo la Biblia o escuchando cultos. Comienza con un par de minutos al día y ya verás como Dios irá hablando a tu vida por medio de su palabra.
Aprende de las historias de la Biblia: en la Biblia hay muchos personajes que creyeron en las promesas de Dios sin haber visto, aún quizás cuando las circunstancias y su lógica les decían que no lo hicieran, que era imposible. Por ejemplo a Abraham y Sara Dios les prometió que les daría un hijo a pesar que ambos ya tenían una edad muy avanzada. Aún así, a pesar de las circunstancias ambos creyeron que Dios cumpliría sin falta su promesa (Hebreos 11:11). Pero también hay muchos otros que al igual que tú y yo dudaron en algún momento. Y un caso muy parecido al de Abraham y Sara es el de Zacarías y su esposa Isabel. Dice la Biblia que ambos estaban ya en una edad avanzada y que a Zacarías se le apareció el ángel Gabriel, anunciándole que Dios había escuchado su oración y que les iba a dar un hijo al cual debían ponerle por nombre Juan. Como cualquier ser humano, Zacarías se asustó y se cuestionó que cómo era posible eso si él y su esposa ya estaban muy ancianos. A lo que el ángel Gabriel respondió: "Yo soy Gabriel, y estoy al servicio de Dios; él me mandó a hablar contigo y darte estas buenas noticias. Pero ahora, como no has creído lo que te he dicho, vas a quedarte mudo; no podrás hablar hasta que, a su debido tiempo, suceda todo esto." Lucas 1:19. Así como estos hay muchos más ejemplos más en la Biblia. Tenemos mucho que aprender a la palabra de Dios.
Pide a Dios que incremente tu fe: somos seres humanos imperfectos y Dios lo sabe. En situaciones difíciles es cuando más dudamos y perdemos nuestra fe. Los discípulos también tuvieron miedo y dudaron cuando una tormenta amenazaba con hundir su bote y despertaron a Jesús para que los salvara. El mismo Jesús les dijo "Hombres de poca fe ¿por qué tienen tanto miedo?" Mateo 8:26. Por eso, es importante tú trabajes por tu cuenta en aumentar tu fe acercándote a Dios y pidiéndole día a día que aumente tu fe un poco más, para que en situaciones difíciles tú puedas llegar a decir: "SEÑOR, NO ENTIENDO PERO CREO"